"La filosofía no es el arte de consolar a los tontos ... su única tarea es la búsqueda de la verdad y destruir prejuicios."

Dominación y democracia



La estructura de la dominación y los límites de la democracia
Slavoj Zizek

Quisiera comenzar con una cita de un discurso reciente del presidente Bush, que no es mi presidente:

“La libertad no es el regalo de América a las naciones sino que es el regalo de Dios a la humanidad”.

Esta posición puede parecer modesta por el hecho de que no privilegia a los EEUU sino que por el contrario yo pienso que es muy peligrosa. Pero ¿por qué? Porque si la libertad fuera solo un regalo de los EEUU a las demás naciones, las cosas serían mucho mas fáciles puesto que los que se oponen a los EEUU se estarían oponiendo a un simple estado – nación. Por el contrario, la libertad si fuese un regalo de Dios a la humanidad, y los EEUU se perciben como el distribuidor privilegiado de esta libertad en el mundo, entonces los que se oponen a los EEUU simplemente se están oponiendo al regalo mas noble que le hizo Dios a la humanidad y por lo tanto quienes están en contra nuestro esta diciendo Dios Bush. Y esto es alrededor de lo cual giró toda la guerra de Irak, de hecho en un libro de dos neoconservadores norteamericanos recientes: William Cristol y Lorenz Edkaplan, ellos escriben: la misión comenzó en Bagdad pero no finaliza ahí, estamos en el umbral de una nueva historia, de una nueva era histórica, este es un momento decisivo, se trata de mucho mas de Irak se trata incluso de mucho más que el futuro de Oriente medio y la guerra contra el terror, lo que está en juego aquí es cuál será el papel que jugará EEUU en el Siglo XXI. Y ciertamente coincido con esa mirada, la guerra de Irak no giró ni en torno al petróleo ni a Irak sino que fue en torno a imponer la visión de los EEUU en el nuevo orden mundial. Permítanme ser claros en este punto. Mucha gente se queja de que los EEUU pretende jugar el papel de policía mundial y mucha gente reprocha a los EEUU que no se comporta como un simple estado nación sino como un imperio. Creo que el problema se plantea en los términos inversos, que los EEUU no son un imperio global, es decir actúan globalmente pero como un estado nación. Tal vez, ustedes recuerdan la antigua consigna de otros tiempos de los ecologistas que era que hay que pensar globalmente y actuar localmente. Creo que los EEUU hacen todo lo contrario, actúan globalmente y piensan localmente. Permítanme dar dos simples ejemplos. En la ex Yugoslavia, en una parte de la ex Yugoslavia, en Servia, el gobierno norteamericano esta ejerciendo una terrible presión sobre el gobierno Servio para que se extradite a los criminales de guerra al tribunal de La Haya. Y al mismo tiempo los mismos diplomáticos norteamericanos están presionando al gobierno servio para que firmen el tratado bilateral por el cual se comprometen a no extraditar americanos o no entregar americanos a la corte de La Haya. Y la misma lógica que busca un funcionamiento global para poder seguir pensando en términos de estado nación también se da en la política económica de los EEUU. ¿Qué es lo que está mal aquí? Quisiera hacer una breve referencia al ex ministro iraki de la información, Muhamed Saharafahad, creo que todos lo recordarán porque todos nos reímos mucho con sus comentarios durante la guerra. Pero una vez dijo la pura verdad y esto fue cuando le preguntaron si era verdadero, cierto, que los norteamericanos ya estaban controlando el aeropuerto de Bagdad y el dijo no, no es cierto porque ni siquiera se controlan a si mismos. Ahora bien, cuál es esa dimensión que los norteamericanos no controlan. En marzo de 2003 el Ministro de Defensa de EEUU se involucró en uno de los debates que tanto le gustan, en el marco de una conferencia de prensa. Este debate que suscitó Ramsfeld giraba en torno a lo conocido y lo desconocido. Y esta es la cita de Ramsfeld: hay cosas conocidas conocidas, que conocemos. Por ejemplo, sabíamos en ese momento que Sadam Hussein era en ese momento presidente de Irak. Sigo con la cita, y después hay desconocidos conocidos, es decir cosas que sabemos que no sabemos. Por ejemplo, mi interpretación es no sabemos cuantas armas de destrucción masiva tiene Irak. Mi comentario es que en realidad no es que nosotros sepamos ahora que no había armas de destrucción masiva sino que los EEUU lo sabían desde un principio, sabían que no lo sabían desde un principio. Un diplomático de EEUU recientemente me dio la clave y es que si los EEUU hubiesen estado seguros que habían armas de destrucción masiva en Irak nunca jamás habrían avanzado en el ataque por tierra, habrían tenido que contar con demasiadas víctimas y esta es la prueba de que ellos sabían que no había armas de ese tipo en Irak. Y vuelvo a la cita de Ramsfeld, tenemos ahora la sutileza filosófica de Ramsfeld porque plantea en esa cita que hay cosas desconocidas desconocidas, es decir cosas que no sabemos que no sabemos. Por ejemplo, el hecho de que Sadam tuviera alguna sorpresa tan terrible que ni siquiera nos podíamos imaginar que podía ser esa sorpresa. (irónicamente) y aquí nos encontramos con el limite del debate filosófico norteamericano porque Ramsfeld se detuvo en este punto. Como ustedes se habrán dado cuenta hay cuatro posibilidades y el solo menciono tres. Menciono cosas conocidas conocidas (sabemos que las sabemos), cosas conocidas desconocidas (sabemos que no las sabemos) y las cosas desconocidas (no sabemos que no las sabemos). La tópica freudiana del inconsciente es precisamente esta cuarta posibilidad: cosas que no sabemos que si sabemos. Es decir las fantasías, los juicios inconscientes de los cuales no somos concientes pero controlan y determinan nuestra acción. Y es en este nivel que opera hoy en día la ideología. Ustedes habrán escuchado este discurso que habla del fin de las ideologías, que vivimos en una era pragmática, posideológica.

Pero aquí podemos aprender una lección que nos enseño la teoría marxista en el fetichismo de la mercancía. Para Marx este fetichismo no se da en lo que nosotros pensamos sino en la manera en la que actuamos. Por ejemplo, todos sabemos que no hay nada mágico en el dinero, que es solo un pedazo de papel que te da acceso a una porción del PBI. Pero el fetichismo se da en la manera en que interactuamos en el mercado y ahí nos comportamos como si creyéramos en la magia. Nunca más que ahora es acertado el descubrimiento de Freud que no plantea la tópica en el sentido de que tenemos una conciencia oficial y una creencia reprimida que puede salir a luz sino que por el contrario nosotros nos creemos personas ilustradas no creyentes, iluministas pero nos comportamos como si creyéramos en la magia. Tomemos por ejemplo los racistas liberales que encontramos en todos lados en Internet. Oficialmente ustedes no saben que son racistas porque respetan al otro, etc. Por ejemplo, cada vez que me encuentro con uno de esos académicos norteamericanos muy políticamente correcto cuando veo cuando como se comportan con personas de otra raza no puedo dejar de percibir que se relacionan con mucha tensión y que en realidad su sentimiento inconsciente es racista. Les voy a dar un ejemplo muy ordinario extraído de uno de mis libros. Me impacto mucho las diferencias de estructura que había en la estructura de los baños en Alemania, en Francia y en EEUU. Como probablemente sepan ustedes, en Francia el agujero por el cual desaparecen los excrementos esta allí detrás como para que desaparezca lo más rápidamente de la visión. En los antiguos baños alemanes se constata un viejo ritual alemán, que en ese agujero de los inodoros está adelante como para que uno no solamente pueda oler los excrementos sino que de paso, pueda hacerse un control de salud y demás…. Los inodoros norteamericanos están llenos de agua, como para que los excrementos floten por ahí. Yo he leído tres libros sobre la comprensión de los inodoros. Es increíble como no se puede encontrar una justificación para estas diferencias. Todos tratan de argumentar de manera instrumental, cual es mas práctico y demás, pero mi lectura aquí es de corte mucho más ideológico. Desde fines del Siglo XVIII se presenta esta idea de la trinidad espiritual europea. Se da el tema de la economía inglesa, la política francesa, y la metafísica y poesía alemanas. Pero acaso, ¿no encontramos justamente eso en la estructura de los inodoros? El enfoque francés es revolucionario (el agujero allá atrás debería desaparecer y ser liquidado lo más rápido posible. El estilo anglosajón es práctico, económico: agua y demás. El estilo alemán, con lo que refleja, tienen una actitud poética. Si bien esta lectura ha sido un poco rápida tengan esto en cuenta cuando tengan una clase magistral y alguien les hable del fin de las ideologías, piensen que apenas termina la clase y esa persona va al baño, ingresa en la ideología.

A lo que voy es que aún un objeto tan simple como un inodoro no puede ser explicado en términos tan simples y básicos. Involucra todo una serie de creencias fundamentales subyacentes y esenciales. Incluso, si tomamos los alimentos, hoy esta muy de moda en los países desarrollados comprar lo que se ha dado en llamar, alimentos orgánicos. Pero la gran mayoría de la gente que compra ese tipo de alimentos no creo que realmente los compre porque esta convencida de que son saludables sino porque más bien quieren hacerlo como acto simbólico, en el sentido que son concientes de su salud. Así que a diferencia de aquellos que afirman que hoy en día no creemos, yo afirmo lo contrario, que creemos más que nunca. Simplemente nos gusta creer desde y a través de la distancia. Por ejemplo, porqué se ha vuelto tan popular el término cultura hoy en día, por qué se habla de estudios culturales, todo lleva el prefijo o el agregado de cultura. Yo creo que hoy en día cultura significa algo muy preciso. Todas aquellas prácticas religiosas ideológicas y demás las practicamos valga la redundancia pero tratamos de actuar como si no creyéramos en ellas. Si ustedes realmente creen en la magia, eso es religión. Si por otra parte ponen el árbol de Navidad, lo arman para los chicos y demás, eso es cultura. Casi todos mis amigos judíos me dicen siempre, yo no creo en eso, simplemente lo respeto por un tema de tradición todo este tema de la cultura kosher….Creo que fue por eso que todo el público occidental es tan esclarecido realmente sufrió un shock tan grande, se acuerdan hace tres años cuando en Afganistán dos talibanes bombardearon las famosas estatuas budistas. Yo creo que en realidad lo que les impacto no fue el hecho de que se cometiera esta barbaridad, este acto realmente barbárico. En realidad el Shock para mí fue que en realidad esa gente quedo impactada con el hecho de que hubiera gente que no tratara a estos monumentos como monumentos religiosos. Y resulta que a esta gente que en realidad lo que hace es tomar en serio sus creencias y prácticas los terminamos llamando fundamentalistas bárbaros. Y aquí el estado o la condición de la creencia es crucial. Yo creo que en realidad los creyentes ingenuos somos nosotros mismos, los supuestamente esclarecidos creyentes occidentales. Por ejemplo, como ustedes sabrán el error de los antropólogos fue el tema que tomaban las creencias primitivas o las que se trataban de una manera estrictamente literal, por ejemplo el caso de las tribus con las que se encontraban que explicaban el origen de todo a través de un pájaro. Pero un estudio histórico ya muestra que esto no era así. Por ejemplo P. Veyne, el famoso historiador francés en su libro, ¿Los antiguos griegos realmente creían en sus mitos? demuestra que en realidad ellos no creían sinceramente que si uno iba a la cima del monte Olimpo se iba a encontrar con Dios ahí arriba. Y yo creo que si hay alguien que tome las creencias demasiado literalmente somos nosotros mismos. Por ejemplo, la mayoría de la gente religiosa que yo conozco, si yo les digo, bueno a ver un momento pero vos realmente crees que allá arriba hay un señor sabio, etc, etc y me van a decir que no están del todo seguro pero sí es importante que los chicos, que sus hijos crean en eso, siempre esto se justifica a través de la necesidad de que otros crean. Por ejemplo, lo mismo pasa con los regalos de Navidad. Los adultos van a decir, nosotros no creemos en esto pero hacemos como que creemos para nuestros chicos. Por supuesto si les preguntan a los chicos también ellos van a a decir que no creen pero lo hacen por los padres. Y lo interesante es que si el sistema de creencias funciona perfectamente aunque nadie crea pero simule creer por la existencia de ese Otro ante el cual quieren fingir que creen. Esto se aplica a otro tipo de sensaciones, de sentimientos, no solamente a las creencias, sino a expresiones tan autenticas como la risa, el llanto, el duelo. Pensemos en este fenómeno en función de las mujeres que en determinadas culturas se contratan específicamente como lamentadoras para gemir y llorar cuando alguien muere. Nosotros nos reímos de esto como si fuera una estrategia primitiva pero en realidad no estamos haciendo lo mismo nosotros? Piensen en el clásico ejemplo de las risas grabadas en esas típicas series de TV como Friends, Cheers, etc. Lo que pasa ahí es mucho más misterioso de lo que parece. Por ejemplo, yo vuelvo cansado como un crypto después de un extenso día de trabajo, prendo la TV, y veo una serie en la cual veo y escucho risas y no me río, simplemente miro. Pero al final me siento aliviado como si yo mismo me hubiese estado riendo, literalmente como si el TV se riera por mi. Yo creo de nuevo que es así como funciona la ideología. Uno no tiene que creer en ella, incluso es mejor si uno no cree en ella. Esa ha sido una lección que yo mismo he aprendido en base a mi experiencia personal con el socialismo en Yugoslavia. De joven vi una charla del Secretario General del Partido Comunista en Eslovenia y nos dijo a nosotros, los jóvenes comunistas, ustedes tienen que seguir la cuarta tesis sobre Feuberbach teniendo en cuenta los principios de Marx no solamente moldear el mundo sino cambiarlo. Y el dijo todo buen comunista debe estudiar a Marx y  actuar en función de los dos libros del Capital. Luego de la charla yo me acerque y le dije cómo fue que nadie le comentó que lo que él mencionó es la tesis numero 11 y que en realidad Marx escribió tres volúmenes del capital. El me dijo, yo en realidad eso lo sé pero justamente a eso iba.

El punto esencial al que apuntaba, era transmitir a la gente que no me importaba. Yo creo que la idea de la interpelación ideológica de Althusser a esta altura se vuelve demasiado simple. Si es que la ideología ha de funcionar, no se la debe tomar demasiado directamente. Por ejemplo, ustedes no deberían identificarse totalmente con determinado concepto, noción religiosa, política o de otra índole. Ustedes tienen que decir bueno, yo no puedo reducirme a una encarnación de una ideología, yo soy una persona compleja con un montón de otros elementos y aristas, no se me puede reducir solamente a eso. Y yo creo que a través de esa diferencia en más respecto de la ideología reconociendo que hay algo más en mi aparte de la ideología es así que la ideología funciona. Yo creo que el más grande ejemplo en la historia de la Iglesia es San Agustín, yo soy ateo y vengo de un país ateo como es Eslovenia, y San Agustín hizo dos cosas: el inventó el interior cristiano moderno, esa profundidad de estudio teológico y psicológico. Pero a la vez, el logró la transformación de la cristiandad para convertirse en religión del estado, y yo creo que las dos operaciones son lo mismo básicamente. Mi mensaje para ustedes es que no se dejen engañar, que no tomen en serio a aquella gente que predica la moderación, que dice que no hay que tomar a las ideologías seriamente porque esos son los verdaderos ideólogos. Ahora quizás después de esta digresión quizás tal vez pueda volver al tema de la guerra. ¿Qué fue lo que pasó concretamente con la guerra contra el terrorismo después del 11 de setiembre? ¿Y que pasó precisamente a ese nivel de presuposiciones ideológicas? Esta de moda decir que en 1989 el año de la caída del socialismo marcó el fin de las utopías. Y yo en cambio creo lo contrario, que en realidad marcó la última década de explosión de una utopía que en este caso fue la utopía liberal capitalista. Fukuyama lo dijo claramente, el hablo del fin de la historia, es decir que sabemos lo que tenemos que hacer y esto es una utopía. Yo creo que el 11 de setiembre marcó justamente el fin de esa utopía. Si el gran símbolo de los años 1989 y 1990 fue la caída de los muros de Berlin, el símbolo de estos últimos años más recientes son estos nuevos muros que se están construyendo, unos literales como el que existe entre Israel y la franja occidental y por supuesto todas esas paredes son muros burocráticos, administrativos y demás. De hecho mi punto es que lo que se está dando últimamente es un deplazamiento fundamental en el funcionamiento de la democracia. Cuestiones que hace diez años habían sido impensables en el inconciente iluminista hoy forma parte de la práctica cotidiana. Hablemos de la tortura por ejemplo. Hace diez, quince años había sido impensable en occidente discutir públicamente acerca de la tortura. Como ustedes tal vez sepan desde el 11 de setiembre, la tortura es un tema publico en EEUU y no solamente de publicaciones marginales de la extrema derecha sino en medios centrales como en Newsweek o Times donde abiertamente se discute de que manera y en que medida hay que torturar a los sospechosos del 11 de setiembre. Por ejemplo, hace dos años un columnista muy respetado de Newsweek Jonathan Alther escribió una nota que llevaba como título: “Es hora de pensar de nuevo la tortura”, y de nuevo, es Newsweek que es un órgano de prensa del centro totalmente respetado y liberal, no es una revista de extrema derecha. Una breve cita de este autor: No pongo en duda que es contrario a los valores norteamericanos la tortura pero aunque sigamos proclamando públicamente contra los abusos de derechos humanos de todo el mundo, necesitamos tener un espíritu abierto y una actitud abierta antes de tomar las medidas necesarias para combatir el terrorismo como la de los interrogatorios psicológicos permitidos por…..y tenemos que pensar también en transferir algunos sospechosos a nuestros aliados menos delicados por más que tal vez resulte hipócrita, nadie dijo que esto fuera ser fácil o divertido. Para mi lo problemático de esta cita no es que esté haciendo apología de la tortura sino por las razones que aduce para ello. Lo espantoso que se está dando aquí es el hecho de la tortura, que se sabe que sucede en secreto, sino lo horroroso es que hemos llegado a un estado donde se puede hablar en público y tranquilamente sobre la tortura. Preferiría que este autor fuera pro- tortura ya que sería más fácil de argumentar. Pero por más que el se plantee como formalmente como contrario legitima la división en torno a la tortura. Se habrán dado cuenta cual es su solución, es terciarizar a la tortura. Creo que este es el punto crucial en torno a la guerra de Irak en la medida en que han surgido sustitutos de nuevas reglas en las relaciones internacionales en lo que hace a derechos humanos y esta es la razón por la cual no deberíamos luchar por las batallas incorrectas, las falsa batallas. Los EEUU nos dice que Husseim era un criminal, no hay que defenderlo a Husseim, por el contrario yo incluso creo que era peor que como lo pintaron los norteamericanos. Acá es significativo que los EEUU cuando enumeran los supuestos crímenes de Husseim se olvidan de los crímenes más tremendos. Sin duda alguna, el crimen más espantoso que cometió Husseim fue su ataque contra Iran y de eso nunca se habla. Porque EEUU lo apoyó en su momento. Y aquí quiero considerar una referencia a Lacan, ustedes recordaran que Lacan decía que si tenemos un marido celoso, de que tiene razón con sus celos porque efectivamente su mujer se esta acostando con todo el mundo, sus celos son patológicos. Y lo crucial en este punto no es saber porque la señora se acuesta con medio mundo sino porque este señor tiene que sostener toda su estructura psíquica alrededor de estos celos tan tremendos.

Lo mismo pasa por ejemplo con el antisemitismo. Es totalmente equivocado discutir con un antisemita diciéndole, estas equivocado, los judíos no son como vos decís. Tomemos Alemania 1937, Cuando los Nazis en su época decían que los judíos estaban seduciendo a las chicas alemanas. Bueno tal vez en cierta manera fuera así, probablemente hubiera algunos judíos que seducían algunas chicas alemanas, lo mismo cuando acusaban a los judíos de estar explotando a las trabajadoras alemanas, probablemente en algunos casos se daba esto, pero este era un falso debate porque el antisemitismo… La pregunta central no es que el antisemitismo reprocha cosas a los judíos que ellos no son en realidad, sino que lo que hay que preguntarse es por qué la ideología nazi necesitaba elegir, buscar en el judío la figura del enemigo para sostener su estructura ideológica. Y lo mismo sucede con la guerra con Irak, la pregunta no es en qué medida Sadam es la encarnación del mal sino por qué los EEUU tuvieron que construirlo como la figura del enemigo, esa es la pregunta central. Pero incluso en un nivel más elemental se esta dando un desplazamiento ideológico mucho más fundamental. Permítanme comenzar con fenómeno un aparentemente trivial. Ustedes habrá notado que en el mercado haya cada vez más productos que están privados de su contenido dañino, o nocivo, café sin cafeína, crema sin contenido graso, cerveza sin alcohol, etc. Esto no se limita a las mercancías, por ejemplo el sexo virtual, qué es el sexo virtual sino el sexo sin sexo. Y que otra cosa es sino el planteo de Collin Powell que hablaba de una guerra de daños colaterales. Es como café descafeinado o guerra sin guerra, en que reside el cambio en este marco. En la ética más tradicional teníamos que gozar de las cosas pero equilibradamente con moderación. Hoy nos encontramos con una suerte de extraña coincidencia de opuestos porque realmente no es posible ejercer la moderación si todo está evitado de su potencial dañino, por ejemplo, ya no se trata de tomar café moderadamente porque como esta descafeinado uno puede tomar todo el café que quiera. En los Angeles tuve un problema en donde tuve que comprar laxantes. Me dieron un producto genial que era chocolate laxante. Así que si estás más constipado, come más chocolate….. creo que esta es la mejor metáfora de hacia donde estamos marchando hoy en día.

A mi me parece erróneo calificar a la sociedad contemporánea como sociedad de consumo, en primer lugar por la obvia cuestión que hay una sociedad de consumo pero solo para el 10 % privilegiado, lo mismo vale para todas estas teorías que hablan de la desaparición del trabajo manual etc., en la sociedad pos industrial, porque el trabajo manual esta desapareciendo de los países occidentales y se esta trasladando a Indonesia, China, etc y esto es amanera en que leo las películas de James Bond. Se dieron cuenta que las películas de J. Bond son películas donde se ven intensos procesos de producción de trabajos físicos manuales, cuando ocurre esto, bueno, cuando J. Bond llega al territorio de los malvados y logra entrar y ahí se procesan drogas, armas. La misión de J. Bond es por supuesto destruir este lugar, tal vez J. Bond no sea un agente inglés y sea un agente de aquellos sociólogos que promulgan que está desapareciendo el trabajo. El otro punto es que cada vez nos da más miedo acceder al verdadero consumo abierto. Este serían las drogas, cocaína, alcohol. Esta es la razón por la cual en los países occidentales la marihuana es tan popular. Es una especie de agencia de peinados, con opio o sin opio uno puede consumirla sanamente. Pero es mucho más interesante descubrir donde, en qué lugar de la estructura ideológica encontramos esta misma estructura del chocolate laxante. Por ejemplo la cuestión de la tolerancia multi cultural. Yo planteo que la manera en la que funciona esta tolerancia es precisamente un signo de lo opuesto, de la intolerancia. Nos referimos con tolerancia cuando decimos que el otro sea pero que no haya acoso. La ideología es que el otro no se acerque demasiado. Lo que fuere que uno haga es una forma de acoso, si te miro demasiado fijo te estoy violando, si me pongo a fumar te estoy envenenando y si te grito es un acoso verbal, entonces la tolerancia significa quedate lo más lejos posible porque no tolero tu cercanía. Y para mi los multimillonarios como G. Soros son una especie de encarnación del chocolate laxante. Media parte del día se la pasa ganando dinero sin ninguna clemencia y destruyendo la vida de personas y la otra parte del día se dedica a devolverle a esa misma gente lo que le sacó. ¿Acaso lo mismo no se aplica para las guerras? Tengamos en cuenta que las últimas guerras todas fueron retratadas como intervenciones pacifistas. Hoy en día las guerras sólo se llevan a cabo para asegurar la paz, es como el chocolate laxante, quieren más paz hagan, la guerra. Creo que U. Beck tuvo razón al acuñar un nuevo término como el utilitarismo humanista pacifista. Y en este sentido coincido con G. Agamben cuando plantea que la lógica contemporánea de los campos de concentración hubieran tenido dos niveles: por un lado Guantánamo: aislar al enemigo, y por el otro, la ayuda humanitaria. En la antigüedad es incluso más radical. Tenemos una situación aparentemente contradictoria. Por un lado tenemos una maquinaria estatal que cada vez nos controla con mayor alcance a la que M. Foucault llamaba la biopolítica. Por otro lado tenemos al opuesto, esta insistencia realmente narcisista en torno a los derechos humanos del acoso que ha tenido lugar. Pero se trata de dos caras de la misma moneda y de manera incluso más radical es aquí donde radica el problema la democracia. Hay un nuevos estereotipo sociológico que plantea que vivimos en una sociedad con opciones excesivas pero yo creo que esta apariencia de posibilidades excesivas, esta plétora de posibilidades, cubre el hecho de que cada vez tenemos menos posibilidad de elección, así que para aclarar este punto permítanme concluir con una anécdota de uno de mis libros: tenemos una escena familiar y su papá su mamá le dice al hijo que vaya a visitar a su abuelo. Si tienen al padre típico autoritario les va a decir bueno, no me importa si quieres ir o no, pórtate bien y anda a visitar a tu abuela y compórtate, pero tienen suerte si esa es la situación en la que están porque si tienen un padre posmoderno les va a decir algo distinto, les va a decir, vos sabe cuanto te quiere tu abuelo no solamente quiero que la visites sino que tengas ganas y todo niño, todo hijo que no es un idiota sabe lo que esto significa. Dentro de esta aparente posibilidad de elección de hacer lo que uno quiere subyace una orden, un mandato oculto, que es que el mandato no es sólo que tienes que ir a visitar a tu abuelo si no que te tiene que encantar ir, yo creo que es así hoy en día como funciona muchas veces la libertad de acción, en realidad de esta aparente libertad de elección se les esta diciendo cual es la decisión que tienen que tomar pero además que tienen que actuar como si fuera su propia elección, por ejemplo es muy común, se ha puesto de moda decir que estamos ingresando en una nueva era posindustrial en la que ya no va a existir esto del empleo a largo plazo y estable sino que vamos a tener que ir adaptándonos y reconvirtiéndonos y tenemos que ir actuando de una manera en la que nos vamos a tener que ir delineando nuestro trayecto a lo largo de la vida de maneras cambiantes, yo creo que este es el ejemplo más duro de la ideología esta situación en realidad traumática de no poder contar con un empleo estable se presenta ahora como una nueva libertad, como una nueva posibilidad de estar reinventándose, convirtiéndose en un sujeto nómada. Y yo creo que eso es lo que dificulta el análisis político hoy en día que nuevas formas de no libertad de falta de libertad se presentan como nueva libertades, por eso yo creo que esa situación en realidad refleja un estado de cosas en el que ya no podemos limitarnos a confiar solamente en conceptos antiguos yo aquí diría que la izquierda todavía no ha sabido reflejar estos cambios.

Piensen en lo extraño de la situación actual, hace 30 o 40 años se discutía como iba a ser el futuro, si comunista, socialista, hoy ya nadie discute de estas cuestiones, todos aceptamos que el capitalismo está aquí para quedarse pero por otro lado estamos preocupadisimos por catástrofes, cataclismos cómicos por ejemplo algún nuevo virus o un nuevo asteroide que termine destruyendo la tierra, la paradoja es que es más fácil imaginarse el fin de toda la vida en la tierra que algo que es a menor escala, el fin del capitalismo, nosotros siempre deberíamos reinventar la utopía, pero en qué sentido, hay dos significados falsos: Uno es este antiguo consejo de imaginarse una sociedad plural que sabemos que nunca se va a concretar y la otra utopía es esta utopía del capitalismo en la cual uno sigue encontrándose con nuevos deseos perversos que no solamente quiere realizar sino que lo obligan a uno a realizar, por ejemplo, y esto que les voy a contar ahora no es un chiste sino que es cierto, en unas pequeñas comunidades norteamericanas bastante radicalizadas hablan del la siguiente opción: hablan de que la gente que adopta a la necrofilia en realidad están sufriendo una desventaja en la sociedad que quizás habría que encontrar la forma de suministrarles los cuerpos, imagínense, se ve como algo posible hacer el amor al cadáver pero por otra parte ustedes serían utópicos si creyeran en la posibilidad de controlar las fluctuaciones monetarias internacionales, yo creo que a diferencia de este tipo de utopía, la verdadera utopía no es algo que uno se imagina, un sueño, sino que es algo que en realidad surge de un impulso, de una necesidad pura y autentica de sobrevivir, una necesidad de supervivencia cuando uno se encuentra en una situación en la que ya no es posible una salida dentro de las coordenadas de lo habitual, entonces nuevamente destaco que la utopía es algo que uno se ve obligado a imaginar uno se ve forzado a imaginarla y no es algo que surja libremente de una fantasía sino que es un imperativo de una urgencia de una situación,




La apuesta de Pascal



Blaise Pascal, filósofo y matemático francés, desarrolló la primera máquina calculadora. Pocos años antes de morir, en 1662, se hizo cristiano y asceta y publicó su menos conocida "apuesta de Pascal", en la que “demuestra” como es más rentable creer en Dios que no creer.

La apuesta de Pascal es un argumento utilizado en la discusión sobre la creencia  en la existencia de Dios, basado en el supuesto de que la existencia de Dios es una cuestión de azar. El argumento plantea que, aunque no se conoce de modo seguro si Dios existe, lo racional es apostar que sí existe. "La razón es que, aun cuando la probabilidad de la existencia de Dios fuera extremadamente pequeña, tal pequeñez sería compensada por la gran ganancia que se obtendría (ir al cielo)." Básicamente, el argumento plantea cuatro escenarios:

Puedes creer en Dios; si existe, entonces irás al cielo.
Puedes creer en Dios; si no existe, entonces no ganarás nada.
Puedes no creer en Dios; si no existe, entonces tampoco ganarás nada.
Puedes no creer en Dios; si existe, entonces no irás al cielo.

La apuesta de Pascal fue expresada por el propio filósofo de la siguiente manera:

Si no creemos en Dios y existieses estaríamos condenados, si no existiese no ganaríamos ni perderíamos nada.
Si creemos en Dios y existiese ganaríamos el paraíso, si no existiese no ganaríamos ni perderíamos nada.
Con lo cual queda demostrado que es más rentable creer (ganamos o no) que no creer (perdemos o no).





Giordano Bruno


Cuando recordamos a los héroes de la libertad  de conciencia y de pensamiento un nombre brilla como  un  sol entre muchos otros. Es el de Giordano Bruno. Y digo bien, héroe y no  mártir como a menudo se lo designa  creyendo honrarlo.

Héroe pues hacía falta un enorme valor para enfrentar al tribunal de la Inquisición con sus históricas palabras: "Tremate forse piu voi nel pronunciare la sentenza che io nel riceverla"  ("Tembláis más vosotros al pronunciar la sentencia que yo al recibirla").

Palabras  estas  postreras  que marcaron el  nacimiento  de una leyenda. En ese instante Giordano Bruno entraba en la inmortalidad   y  tuvo  aún  más gloria, si cabe, cuando  poco después  era flagelado, enmudecido con mordaza de hierro y conducido al  Campo di  Fiori  donde fue quemado vivo el  19 de febrero del año 1600 como si hubiera sido el peor de los criminales.  Todo ello por no querer reverenciar dogmas que son falsos desde el principio al fin. No se sabe que fue mayor en sus verdugos: si la estupidez  o si la maldad. A ninguno de ellos  le  importó  que  Giordano Bruno fuera una de las mentes más lúcidas de  Europa, conocido  y honrado en los círculos académicos de todo el continente y autor de crecido número de obras leídas y discutidas con apasionamiento. Fue Giordano Bruno catedrático  en Wittenberg, Paris, Noli, Toulouse y Oxford pero esto no contaba para  los personeros  del  oscurantismo que lo mantuvieron  ocho años en prisión y torturas antes de su terrible final.
   
Todo  esto  nos asombra hoy como acto de  barbarie. Han pasado casi cuatro  siglos desde que Giordano Bruno fuera asesinado  y  quisieramos creer  que  ya no podría ocurrir algo semejante. Nos equivocamos sin embargo pues siguen ocurriendo cosas similares  y aún peores en este nuestro siglo en tantos lugares donde  faltan las libertades. Y tenedlo por seguro: si en Occidente ya no  se  tortura y mata por motivos puramente religiosos es debido únicamente a  que  las fuerzas de la ignorancia, el fanatismo  y  la superstición ya no tienen el poder de antaño. Si lo tuvieran las cosas serían aún peores. 
   
Mantener intacta la  pompa  de jabón de los mitos y de los dogmas costó mucha sangre. Nos  duele la de los ilusos creyentes convencidos de dogmas falsos pero  aún más doloroso es el suplicio de los grandes hombres que cometieron el  que los intolerantes consideran como terrible delito: pensar. 
 
Terrible  porque  el pensar es veneno mortal para los dogmas  de  cualquier  clase. La Verdad está  siempre más allá y no  se  puede encerrar en  fórmulas rígidas. "El Infinito retrocede y  se  nos escapa" como bien afirmaba Honorato de Balzac.  

Vale la pena efectuar una síntesis de la vida de Giordano Bruno antes de ocuparnos de su obra. Por cierto que su vida fué tormentosa y novelesca, plena  de apasionadas polémicas y enconos y digna de ser llevada incluso al cine (en una película más fiel a la realidad histórica que la  que todos conocen). Por ello la sintetizaremos aquí con algún detalle.
  
El  tema principal de nuestro programa es tratar al menos en forma sintética  e introductoria al famosísimo  "Arte  de la Memoria" donde, como se verá, hay mucho más que memoria y memorizaciones.  En esto Bruno navegó hacia aguas muy profundas,  señalando una vía hacia el éxtasis y los estados superiores de  conciencia a partir de las disciplinas mnemotécnicas. Pero dejemos esto para  más adelante pues es importante conocer antes algo   de  la vida del autor para comenzar a comprender  tanto su obra como su destino.  
 
Nacido  en Nola a comienzos de 1548 (con el nombre  de Filippo Bruno) era hijo de Giovanni y Fraulissa Bruno, siendo  la  madre probablemente de  familia alemana. El haber nacido  en  Nola  le valió el apodo del Nolano con que se conoce hasta hoy a Giordano Bruno.  Adoptó  luego el nombre de Giordano al vestir  el  hábito dominicano en junio de 1565. En 1566 profesa y en 1572 es ordenado  sacerdote. En 1575 se doctora en Teología y ya para entonces se apoderan de el dudas razonables e inevitables sobre los dogmas de la Trinidad y de la Encarnación.
 
En 1576 es procesado dos veces por las  autoridades eclesiásticas. El primer  proceso fue debido a que  había tirado varias imágenes de santos que había en su celda, conservando tan solo el crucifijo.  La segunda por recomendar a un novicio lecturas  que fueron  consideradas inadecuadas y por  defender las  doctrinas arrianas.  Bruno siempre sostuvo que Arrio no había  sido  bien comprendido. En marzo de ese año huye del convento y peregrina dos años por Liguria, Piamonte, Veneto y Lombardía. Enseña Astronomía por un breve lapso en la Universidad de Noli cerca de Génova.
 
En  Venecia imprime su obra ahora perdida "De los signos  de los  tiempos". En 1579 abandona definitivamente el hábito religioso.

En 1579 del Piamonte pasa a Chambery y luego a Ginebra, donde lo  asila y protege el napolitano calvinista Marqués de Vico.  Aunque se  niega a abrazar el calvinismo es recibido con honores en  la Universidad de Ginebra en mayo de ese año. Pero posteriormente su violenta refutación al profesor calvinista de la Faye le vale ser arrestado y sometido a proceso. Bruno huye de Ginebra tan  pronto como puede lleno de rencor contra las autoridades.  
   
Comienza  una  nueva etapa. Pasa por Lyon y  llega  a Toulouse, centro del protestantismo francés,  donde  permanece dieciocho meses. Allí recibe su doctorado en Artes y una cátedra de filosofía en la Universidad. También explica Astronomía y dicta un  curso sobre  el De Anima de Aristóteles, el que vuelca en una obra  hoy perdida.  
   
De  este  período data su Clavis Magna, también  perdida, donde trataba el arte de la memoria y el lulismo. No cabe duda que  el genial mallorquino Ramón Llull (o Raimundo Lulio) fue para Giordano  Bruno  gran fuente de inspiración a lo largo  de la mayor parte de  su  vida. El lo llamaba "el divino Lulio"  y solo le reprochaba dos cosas: haber querido reformar la lógica aristotélica  que  es  perfecta y tratar de demostrar postulados de la religión que solo la fe puede imponer.
  
Lulio  junto con el filósofo alemán Niklaus  Chrypffs  (llamado Niklaus von  Cusa) fueron los dos autores individuales  que  más influyeron  en Bruno. De este último afirmaba el Nolano:  "Si  no hubiese infectado su genio la vestidura del sacerdote, ese  genio hubiese no solo igualado sino superado al de Pitágoras". Recordemos  de paso que el no solo genial sino generoso Nicolas de Cusa (Klaus von Cusa) es el origen de la leyenda de Santa Claus o Papa Noel. Volveremos luego sobre estos dos autores en relación a  la obra del Nolano. No debe olvidarse tampoco la influencia de otros dos grandes pensadores alemanes sobre Bruno. El primero,  Alberto Magno, una de las mentes más poderosas del medioevo y maestro  de Tomás de Aquino. El segundo fué Meister Eckhart, a quien probablemente Bruno conoció  y trató durante su  posterior estadía  en Alemania, según señala Albert Rivaud.
  
Habíamos  dejado  al  Nolano en Toulouse en  1581.  Es entonces cuando Bruno  se vé duramente atacado por  los aristotélicos  y abandona esa ciudad, dirigiéndose a Paris. Allí el tema del lulismo está  de  moda  y Bruno dá conferencias sobre este  asunto.  Sus conocimientos  de mnemotecnia atraen la atención del rey Enrique III,  quien lo llama. La curiosidad del rey era si la memoria  de Bruno  era debida a artes mágicas, cosa que Bruno niega rotundamente. El rey le otorga una cátedra rentada en la Universidad  de Paris. Bruno  en agradecimiento le dedica al rey su obra  "De umbris  idearum" , la que trata del arte de la memoria. En breve lapso aparecen otras dos obras suyas dedicadas al tema: el  "Cantus Circaeus" dedicada a Enrique de Valois, duque de Angulema y el "De compendiosa architectura" dedicada a Juan Moro, embajador  de Venecia  ante el rey de Francia. Incluso escribe una comedia  "Il Candelaio" donde  se anticipa el estilo que usará  luego  en su célebre "Spaccio".  Pero el inquieto Bruno no es  de permanecer demasiado tiempo  en el mismo sitio y en marzo  de 1583 decide partir  a Londres. Lleva una carta de presentación del  embajador inglés  en  Francia en la que se recomienda a Giordano  Bruno  en todo sentido menos, literalmente, por su  religión.
  
En abril de 1583 parte finalmente hacia Inglaterra. Se ha afirmado que llevaba un designio político dado por el rey de Francia como tambien se ha dicho que retornará al continente como  espía inglés. No hay la menor prueba de una cosa ni de la otra y es de pensar que los herederos de sus asesinos siembran estas y otras calumnias  para enturbiar su memoria.

En  Londres escribe y publica cuatro obras sobre el arte de  la  memoria. Enseña en Oxford pero estalla una polémica tan violenta que  la cólera de los teólogos oxonienses lo obliga a refugiarse en la embajada francesa. A pesar de todo esto permanece en Ingla­terra  durante todo 1584 y parte del año siguiente. Allí escribe algunas  de  sus obras más famosas, principalmente  en italiano. Debe destacarse que la mayor parte de su producción está redactada  en latín, lengua culta de esos tiempos. Ven así la luz  "Del infinito  universo  y  los mundos", la "Expulsión  de la bestia triunfante", la "Cena de las cenizas" , "De la causa, principio y unidad",  "De  los heroicos furores"  y la "Cábala del caballo Pegaso".Algunas de ellas están dedicadas a Sir Philip Sidney  (su protector) y en cuyo círculo literario vemos brillar a Giordano Bruno durante esa época.
  
Pero conflictos y traslados parecen ser el leit-motiv  constante en la vida de Bruno. En otoño de 1585 regresa a Paris y  se encuentra  que  quien iba a ser su nuevo protector, el  Marqués de Mauvissière,  no  podrá ya serlo pues ha caído en  desgracia por motivos políticos. Como no le queda otro camino y con no poca repugnancia  intenta reconciliarse con la Iglesia. Su gestión ante el nuncio papal fracasa pues se le ordena reingresar en los dominicos,  a lo que Giordano Bruno se niega terminantemente.  

Escribe para  ese tiempo su "Arbor Philosophorum"  (perdida), la que  se supone tenía contenido mágico-cabalístico-lulista y mnemotécnico. En  1586  aparecen en Paris  nuevas obras suyas: un comentario mnemotécnico-mágico a la física de Aristóteles, el "Idiota triunfan­te" que se refiere a la matemática y a un curioso compás de  ocho puntas inventado  por su compatriota Fabrizzio Mordente.  

Esto también  le acarreó odios y dificultades. Y como parece  ser  el  signo constante de su vida se aproxima un nuevo y terrible escándalo que le obligará a salir de Francia. Por boca de su discípulo Jean Hennequin expone Bruno en el Colegio de Cambray sus "Ciento veinte proposiciones contra los peripatéticos sobre la naturaleza y el mundo". Los erúditos y doctores quieren llegar a la violencia. Bruno les calma como puede y huye de Paris. El 25 de  julio se encuentra en Marburg pero la Universidad le niega una cátedra.   La  consigue poco después en Wittenberg donde permanece por dos años. En ese período publica una gran cantidad de obras en latin, que no  son lo más conspicuo de la  producción bruniana.  Luego parte de Wittenberg, donde la libertad de cátedra se veia amenazada por el fanatismo pero ahora calvinista.
  
Comienzos  de  1588. Giordano Bruno llega a Praga donde permanecerá por solo seis meses. Es recibido por el emperador Rodolfo II,  interesante personaje filósofo, esoterista y alquimista y protector  conocido de filósofos y magos. Le dedica al emperador un  par de obras sobre mnemotécnica y  mathesis lulistico-bruniana. Como el emperador le dio  dinero pero no cátedras u otro  trabajo, se marcha el Nolano a Helmstedt a finales de 1588. Allí se incorpora  a  la Universidad y comienza una época de  gran producción gracias  tal vez a su amigo Jerome Besler, natural de Nürnberg, a quien el Nolano le dicta multitud de obras. Entre estas últimas se cuentan "De la magia", "Tésis mágicas", "Principios, elementos y causa de las cosas", "Medicina luliana" y "Magia matemática". Protegido por el  duque Heinrich  Julius escribe una oración a la memoria del padre de este donde asume la posición más violentamente anticatólica y antipapista  que  se recuerde en toda su vida. A los esfuerzos y cuidados de su  amigo Besler  ya mencionado se debe que varias obras de Giordano  Bruno se hayan conservado.
   
En abril de 1590 Bruno y Besler dejan Helmstedt. Bruno se dirige a Frankfurt,  donde publicará varias de  sus  obras filosóficas entre  ellas la bien  conocida "Del  infinito universo y los mundos". Tras una breve estadía en Zurich y Elgg en el invierno de 1590-91 retorna Bruno a Frankfurt.
 
Ya despunta en el horizonte la tragedia final. Un patricio veneciano, Zuane Mocenigo, le escribe dos cartas a Frankfurt. En ellas  lo invita  a concurrir a Venecia para enseñarle el arte de la memo­ria,  la invención y la geometría. Pero en realidad  lo que le interesa a Mocenigo es la magia. Posiblemente algunas fanfarronadas de Bruno respecto de sus conocimientos al respecto excitaron la codicia de Mocenigo. Bruno acepta y llega a Venecia en septiembre  u octubre de 1591.  Era mucha audacia como los hechos  lo probaron más tarde. En realidad Bruno acariciaba la idea descabellada  de exponerle personalmente al Papa sus planes de reforma religiosa, moral e intelectual. Antes de mudarse a casa de Mocenigo  Bruno reside en Venecia por su cuenta y viaja a Padua acompañado por Besler, su amigo inseparable, quien sigue actuando de secretario.

De esta época solo se conservan algunos escritos suyos fragmentarios.  Por  fín se instala en Venecia en casa de Mocenigo y  no tardará Bruno en descubrir la increíble villanía de este aparente nuevo protector suyo.

Los acontecimientos se precipitaron: cuando Bruno le comunica a Mocenigo  su  deseo de viajar a Frankfurt este  le  replica  que quizás  la intención real de Bruno es impartir sus  enseñanzas  a otros  antes  que a el. Bruno no toma en serio  las  amenazas  de Mocenigo  y, al reiterarle que desea partir, su violento y  villano anfitrión le dice que el encontrará los medios para que Bruno  se quede en su casa. Como a la noche siguiente Giordano Bruno reitera sus deseos de viajar, Mocenigo cumple sus amenazas. Encierra a Bruno  en un aposento de su casa y lo denuncia a la Inquisición (tan mal llamada Santa). El resto de la historia es bien  conocido. 
 
Se  lo acusó entre otras infamias de pretender saber más de  lo que  los Apóstoles podían saber y de haber dicho que la  religión verdadera era la egipcia. En esto Giordano Bruno estaba equivoca­do  pues lo que el llamaba religión egipcia eran en realidad  los textos  del hermetismo griego como el "Asclepios" y el "Poimandres".  
 
En  septiembre de 1592 es trasladado a Roma, donde continúa el proceso, por pedido del Cardenal de Santaseverina, Supremo Inquisidor Romano. El proceso marchó con extraordinaria lentitud.  Se pretende hacerle abjurar de ocho proposiciones heréticas extraídas  de sus obras. Se le leen estas proposiciones en febrero  de 1599. Giordano Bruno contesta viril y heroícamente que ni debe ni quiere  ni puede retractarse. Ante esto el infame Papa Clemente VIII lo condena a ser entregado al brazo secular, forma eufemística y usual para la Inquisición de denominar a la sentencia  de muerte. Cuando antes  de la ejecución se le enseña un crucifijo  el Nolano dió vuelta la cabeza con ira, según refiere un tal Schopp en  una  carta de la época, donde califica a Giordano  Bruno de monstruo por el solo delito de pensar.

Pasemos ahora a analizar globalmente la producción filosófica de Bruno antes de desembocar en lo más atractivo que es su mundo de ideas mágico-cabalístico-astrosófico que culmina en el arte de la memoria. Su filosofía es clara y se basa en principios tradicionales  (en el sentido de René Guénon). No parece sin embargo  ser filósofo  demasiado leído  en nuestro tiempo, sin duda  por  su  estilo y por la dificultad para poder hallar muchas de sus obras. 
 
A  menudo  recurre al diálogo o a la  conversación  entre varios personajes, lo que no agrega fluidez a sus escritos ni se  adapta  a los gustos modernos. Con poca modestia pero sin faltarle buenas  razones Bruno se autotitula en "La cena de las cenizas" como "el  Sol naciente" que hace revivir "la antigua filosofía enterrada en  las cavernas tenebrosas de la ciega y malhechora ignorancia".

Giordano Bruno en sus comienzos fue sin duda influenciado por el pensamiento neoplatónico y su admiración por la teoría copernicana.  Recoge además  otros múltiples elementos provenientes tanto  del estoicismo  y misticismo como del monadismo. Siguiendo a Ferrater Mora digamos que en Giordano Bruno la mónada es la verdadera sustancia de las cosas, como el "mínimo"simple e irreductible a cualquier otra entidad. La mónada es esencia del individuo pero de un individuo que no está literalmente aislado y separado del resto sino en comunidad esencial con ese resto. Por ello tambien Dios es monas monadum, la Mónada de las mónadas o la Mónada Suprema.
 
Todo esto lo  conduce  a defender con vehemencia las doctrinas de la infinitud del univer­so y de la pluralidad de los mundos. El universo es concebido por él no como sometido a un destino rígido sino como algo en permanente  cambio  y evolución siguiendo un orden  fijado  desde  la eternidad. Lo superior y lo inferior están ligados por una sola y misma vida que es infinita e inagotable. En esto se acerca a  los Upanishads hindúes  y al Hermetismo Tradicional al destacar  el misterio de la Unidad, siguiendo sin duda los pasos de su  inspirador Niklaus von Cusa.
 
Para  el  Nolano la infinitud espacial y temporal  del universo corresponden  a  la infinitud de Dios, en donde coinciden  y  se sintetizan los opuestos y que está por su naturaleza infinitamen­te por arriba del mundo aún cuando se halle presente también  en la materia y   fuera de esta, siendo la causa inmanente  de todo. El universo está pues penetrado de vida y es él mismo vida, un organismo infinito que contiene a los organismos  particulares que son  los infinitos mundos, los infinitos sistemas  solares análogos al nuestro. Lo que rige a esta infinitud de mundos es la misma Ley pues Dios es uno y está presente en todas las cosas y seres de todos los reinos (mineral, vegetal, animal y humano), en suma  es siempre la misma vida, el mismo espíritu y orden y,  en suma, el mismo Dios.
 
El  universo visible y sensible es para Bruno la sombra  de la Unidad, del Principio pero también de la posibilidad total que no conoce  contradicción ni límites. El parentesco estrecho  con  la doctrina de  los Upanishads y con el hermetismo  tradicional  es aquí innegable y hace para nosotros evidente que Giordano Bruno estuvo en contacto con fuentes iniciáticas, aún cuando no podamos precisar  cuales  y  en que momento de su vida. Es más, en  sus "Escritos latinos" al tratar las "imágenes de palabras" Giordano Bruno  desliza, para quien sabe ver, una clave iniciática que  es contraseña  y aún mucho más que eso (y que era bien conocida de los Fedelli  d' Amore entre otras organizaciones iniciáticas).
 
Aquí  ya  no caben dudas pero es notable que a la máxima autoridad  en el tema   Bruno,  la  Dra. Frances Yates, el asunto le pasa  completamente desapercibido pese a ocuparse explícitamente del mismo pasaje. De más está decir que no voy a revelar aquí cual es esa  clave  pero queda  con esto en pie la firme certidumbre de  que  el Nolano poseía una filiación iniciática templaria. La mención de ciertos temas  o la inclusión de ciertas frases reveladoras es  la  forma clásica  de darse a conocer de los Iniciados. Pero como  reza  el "Romance  del Conde Arnaldos", clásico poema  iniciático español del medioevo: "Yo no digo mi canción sino a quien conmigo va". De hecho  hay mucho más de lo que se supone en el "Arte de la Memoria"  o memoria artificial (como también se le llamaba).    
  
Para Bruno  Dios está presente en todas las cosas con Su infinito Poder, Sabiduría y Amor y El es todas las cosas, lo más alto y  lo  más bajo, el máximo y el mínimo o bien, para emplear la terminología  del  Nolano, la mónada de las mónadas.  El Nolano celebra la unidad e infinitud del cielo en donde el movimiento de los astros "canta la excelencia y gloria de Dios".
 
La misión del ser humano para Giordano Bruno es el entusiasmo y adoración al contemplar el universo, manifestación del Ser Supre­mo. En esta adoración frente a la Unidad Suprema reflejada en  el mundo se halla el camino a la Unidad de las religiones, trascendiendo todos los dogmatismos. En esta adoración surge el "heroico furor" (título de una de sus principales obras), furor que  Bruno debe haber experimentado en grado sumo ya que murió defendiéndolo con valor hasta el fin. En "La causa", obra publicada en Inglaterra, expresa además un pensamiento perdurable: "Para el  filósofo toda la tierra es patria".

Las conclusiones de Bruno son claras: si bien los individuos son innumerables el Todo es Uno y conocer esta Unidad es el objetivo de toda filosofía y de toda contemplación. Palabras dignas de  un Iniciado, que sostenía además que en nada se diferencian el acto pleno  y  la  potencia plena, destacando así aún  más  la  unidad natural  del Ser. Bruno llega de este modo a un monismo donde Principio, Alma, Materia, Universo, Potencia y Acto se confunden en un  solo Ser.
 
Giordano  Bruno no fue un panteísta como creen algunos autores modernos sino que supuso un retorno a la idea tradicional de inmanencia frente a la teología absurda centrada en un dios personal con barba y sentado en un trono.

Vale la pena decir algo antes de entrar en el tema de la memoria respecto de la concepción bruniana de la Bestia. Esta representa los abusos del pasado, miserable y sucio. Se trata pues de vencer a la Bestia y expulsarla gracias a la  Conciencia.  Ella cuenta  con sus fuerzas que son la Verdad, la Sabiduría, la  Prudencia,... La Virtud pertenece a las almas generosas que tienen el deseo del bien y el amor a Dios. Con estas fuerzas se inicia para la Conciencia la lucha que expulsará a la Bestia y le permitirá a ella su subida en espiral hacia el Ser.

El arte de la memoria
 
Entremos por fin en el Arte de la Memoria en su versión bruniana para tratar de dilucidar su contenido y reales alcances.   Digo  "versión  bruniana" por cuanto existían predecesores de Bruno en el  tema desde muchos siglos antes. En este punto estoy en deuda con los libros de la Dra. Frances Yates "El arte de la memoria" y "Giordano Bruno y la tradición hermética" los que, aún cuando constituyeron al publicarse un avance notable, no agotan el  tema por  la naturaleza misma de este.
 
En el mundo antiguo, en el que no existían libros ni computadoras  para  guardar información ni papel abundante y barato  para tomar  notas,  la memoria tenía extraordinaria importancia  pues solo en base a ella se podían atesorar los conocimientos y hechos del pasado. Desgraciadamente hoy el arte de la memoria se considera  cosa dedicada a escolares retrasados y que no  pertenece  a ninguna disciplina científica en particular. Viene así a ser cosa de nadie cuando en realidad es cosa de todos. Esto por cuanto fue el  genio  de Giordano Bruno el que descubrió que las  clásicas mnemotecnias  constituían un acceso a estados superiores de  con­ciencia.  
Esto hará comprender porque pongo tanto énfasis  en  el tema.
   
Naturalmente,  como  decía  Ortega y Gasset, las  ideas  de  los grandes  hombres alimentan muchos años después el debate  de las plazuelas. No hace mucho tuve ocasión de ver en un folleto repartido  en  uno  de esos lamentables cursos de  control mental un párrafo  dedicado  a la memorización. Mi indignación  estalló al comprobar que era una adaptación moderna de las técnicas preconizadas por Giordano Bruno, al que por supuesto no se mencionaba.

En  realidad  y  como se ha dicho el arte de la  memoria  en su esencia  es cosa muy antigua. Es célebre la anécdota  del poeta Simónides de Ceos (circa 500 a.C.) a quien se considera el creador original de la técnica.
 
Estando Simónides en un banquete en casa de un noble de Tesalia llamado  Scopas declamó un poema en honor de los Dioscoros o  sea los celestiales  gemelos Cástor y Pólux. Simónides había sido contratado por el anfitrión Scopas para declamar ese poema.  Pero al  finalizar  el banquete Scopas solo le pagó la mitad de  lo convenido alegando  que, dado que el poema era en honor de los Dioscoros, esos dioses debían pagarle el resto. Tras esto Simónides fue llamado a la puerta por los servidores que le manifesta­ron  que  dos jóvenes de aspecto radiante  le andaban buscando. Simónides acude pero no halla a nadie. En ese momento se derrumba el  edificio  y  mueren todos los asistentes al banquete  menos Simónides  que se hallaba afuera. Los dioses le habían pagado su parte. Pero el problema fue que los deudos no pudieron  identificar  a los muertos, los que estaban  destrozados. Simónides identificó  a cada uno pues había asociado su rostro y nombre  a cada lugar en la mesa de banquete. Así nació el arte de la  memoria.
 
La  técnica es simple en lo básico y aplicable no solo a entes concretos como ser los asistentes al banquete sino a ideas abstractas.   Cicerón en "De oratore" retoma el asunto y lo explica muy sencillamente: las personas que han de recordar cosas deben seleccionar lugares y formando vívidas imágenes mentales de  cada cosa  que deseen recordar las han de asociar a esos lugares, de manera que el orden de los lugares elegidos recuerde el orden  de las  cosas seleccionadas. Los lugares pueden  ser abstractos  o imaginarios  como también las cosas a recordar. En la Edad Media se usaban entre otros muchísimos esquemas los nueve círculos  del  infierno  dantesco y los doce signos del zodíaco. Quintiliano  en su "Institutio oratoria" cuenta como Metrodoro de Scepcis emplea­ba  como  lugares  o "loci" los trescientos sesenta grados de  la eclíptica, cosa que revela descomunales desarrollos memorísticos. Del famoso predicador Francesco Panigarola se afirma que empleaba hasta  cien  mil lugares para recordar otros tantos  conceptos  o hechos.
 
Se  basa pues la técnica en crear ante todo imágenes vívidas  y claras  de los lugares reales o ficticios, pudiendo  desde  luego aprovecharse ventanas, pilares y cuadros del aposento en que uno se  halle. A estos  "loci" hay que asociarles imágenes bien nítidas de cada cosa a recordar. Hasta aquí no hay sorpresas y los apresurados e irreflexivos de siempre dirán que todo es simple cuestión de asociaciación de ideas y en suma una niñería. Pero se equivocarán completamente.
 
De hecho en los desarrollos brunianos del Arte de la Memoria  y en la conexión del Nolano con el genial alemán Gottfried  Wilhelm Leibnitz  -conexión indudable como puntualiza Yates- se  infieren las huellas de una sociedad hermética que Bruno fundara en Alemania (los "Giordanistas") y que luego tomara forma y se expandiera como la Fraternidad Rosacruz. Esta conclusión es de Yates,  quien señala que aún resta mucho por investigar en el tema. Se sabe que Leibnitz era Rosacruz como el mismo insinúa en sus escritos y  ha investigado  Couturat.     Diremos aquí como novedad que  ciertos símbolos  inequívocos que aparecen en la portada de algunas  ediciones  originales  de las obras de Leibnitz lo  identifican  sin lugar a dudas como Iniciado. Así por ejemplo en sus "Philosophische Schriften"  deja traslucir algo al respecto. Las reglas de su proyectada Orden de la Caridad son copia de la Fama Fraternitatis Rosacrucis  y su monadología lleva la marca a fuego de la Tradición Hermética. Es curioso señalar que el gran competidor  inglés de Leibnitz o sea Isaac Newton también era Iniciado y dejó  miles de  páginas  inéditas  sobre Astrología y sobre  Alquimia. Bien entendido, los charlatanes que ahora se presentan como Rosacruces (y  que solo son expertos en sacarle dinero a los incautos) nada tienen  que ver con los verdaderos Rosacruces a los que  también perteneció René  Descartes entre otros muchos. Hoy  por hoy  la verdadera Orden Rosacruz es completamente inaccesible al gran público y las que se presentan con ese nombre son meras organizaciones comerciales.
  
Retornando  a  la "memoria artificial" o "Arte  de  la Memoria" diremos  que  es muy larga la lista de autores eminentes  que  lo emplearon,  incluyendo  a Alberto el Grande, Tomás  de  Aquino  y Brunetto Latini (maestro del Dante), Petrarca, Cornelius  Agrippa y Erasmo  de Rotterdam.  Que la técnica es útil  y  perduró  lo prueba  el hecho de que el último tratado  práctico  sobre  ella apareció en Viena en 1936, debido a Volkmann.
 
Pero aquí queremos ir más lejos y para ello debemos mencionar al gran renovador  del Arte de la Memoria que  fue  el mallorquino Ramón Lull, ya mencionado. A eso de los treinta y siete años Lull   tuvo una experiencia iluminativa que cambiaría toda su vida. Teólogo, alquimista, experto en temas de la Caballería dedicó su vida a profundizar en el Arte de la Memoria al que le dio contenido  y orientación teológicos. Su gran innovación en este campo fue  la  introducción  de un sistema de ruedas concéntricas divididas en sectores y que permiten multiplicar en forma increíble el número de los los "loci" o lugares  a  los que se asocian los conceptos  a  memorizar.  Esto inspiró tanto a Bruno como a Leibnitz. A este último lo condujo a tratar con problemas de matemática combinatoria, que ya le habían interesado al conocer los hexagramas chinos del I-Ching posiblemente por obra de misioneros que habían retornado a Europa.  La obra fundamental y culminante de Lull es su "Ars Magna" donde  lo teológico se inserta y estructura en sus ruedas mnemotécnicas.
  
Y así tenemos todo preparado para que irrumpa el genio de Giordano Bruno en el mundo de la memoria artificial (nombre este  que le fuera dado a estas técnicas por Ramón Lull). Con Yates hay que coincidir  en que hay cábala y magia en la obra de Bruno.  Pero personalmente creo que todo esto pecaba de superficialidad grandilocuente y fanfarronesca, tal vez con ánimo de atraer  incautos generosos. Ya vimos cuan caro le costó esto a Bruno con Mocenigo, quien  lo invitó a su casa precisamente para aprender el Arte  de la  Memoria.  El descubrimiento de Bruno fue que este Arte practicado de determinada forma conducía a estados  superiores  de conciencia y conocimiento, dotando a la creatividad  e imaginación  de un vuelo que jamás hubieran conocido de otro modo. Esta idea  presidió  toda  su  producción, desde su primera  obra  hasta la úlltima.  Tal vez por ello se animó a decir con su habitual falta de modestia que el comprendía al lulismo mejor que el mismo Ramón Lull  (así como había insinuado en "La Cena de las  Cenizas"  que Copérnico le había preparado el camino a él).
 
Sea como sea, si queremos reconstruir el pensamiento bruniano la mejor guía  serán sus obras publicadas en Inglaterra  donde, al parecer,  se sincera más que en sus obras de Alemania y de Francia. Esta exposición no estaría completa si no damos algún detalle adicional al respecto. Bruno toma como base de su sistema el número  treinta: el porque de ello no se dice pero el número  se repite  por doquier. Treinta son las divisiones de  sus círculos lulianos,  treinta  la lista de espíritus conjurables  que Bruno menciona,  treinta letras tiene el Gran Nombre de  Dios, treinta eran los discípulos de Juan el Bautista, treinta los eones de los gnósticos.  Yates no acierta con la razón de esto y  lo confiesa pero  la clave es numerológica y muy simple:    2 X 3 X 5 = 30. 
 
La tríada  inicial  de  los números primos genera  por  producto el treinta como síntesis o resultante que corresponde a la  síntesis de las  virtudes  teologales (Fe, Esperanza, Caridad)  y  de  la tríada interna  de  las Tres Potencias del Alma  de Agustín  de Hipona: Memoria, Entendimiento y Voluntad. Bruno define Treinta Sellos de la Memoria que deben ser abiertos para llegar al  Sello de los Sellos donde se revela un "Secreto" que es el retorno a la Unidad en la unión con el Anima Mundi.
 
En  realidad los Treinta Sellos brunianos son explicaciones de las Reglas del Arte de la Memoria complicadas un  tanto artifi­cialmente con nociones cabalístico-mágicas  y donde Giordano Bruno no hace más aparentemente que exponer lo que aprendió del Arte de la  Memoria en el convento de dominicos. Pero hay mucho más  gracias a que Bruno efectúa una curiosa astrologización de la mnemotécnica clásica que le permite no solo multiplicar las  posibilidades increíblemente sino que además posibilita la interacción de los lugares y de las imágenes o ideas asociadas. Lo  que hace Bruno aquí es trabajar con dos conjuntos de  ideas,  memoria y astrología. De acuerdo a la tradición mnemotécnica todo lo recordamos por medio de imágenes, las que conviene sean percusivas y emocionalmente potentes. Los autores a partir de  Aristóteles insisten en que solo podemos pensar con y  por  medio  de imágenes. Creadas estas en cuanto a las dos sucesiones de lugares y de conceptos, se los coordina en correspondencia biunívoca (uno a  uno)  a los elementos de ambas sucesiones. Claro está  que  en tiempos de Bruno se consideraba mágicamente potentes a las imágenes  y símbolos de los signos del zodíaco. Esto hoy nos  suena  a completa  inocentada. Bruno hubiera estado  de  parabienes con series  simbólicas  como las de Charubel, la Volasfera  o Pierre Christian pues hubiera visto en ellas magia pura. Pero lo llamara como  lo llamara la gran idea esta ahí. Bruno ensaya con  uno  y otro sistema de memoria hasta llegar a uno que refleje ante  todo las casas de un horóscopo, los signos, los planetas y las estrellas fijas y que pueda reflejar las cambiantes relaciones  mutuas que tienen entre sí en el transcurso del tiempo.  Naturalmente esto es realizable de distintas formas pero conduce finalmente  a una elevación  de la conciencia al integrar conceptos a  recordar y leyes cosmosóficas.
 
Bruno  mismo recomienda poner una carga emocional-afectiva en  todas las imágenes para poder, en "furor heroico",  abrir dentro de  la psique lo que el llama "las negras puertas  de diamante". Por último,  en el "Sello de los Sellos" Bruno desemboca  en  la experiencia metafísica y se presenta a si mismo como  un  guía espiritual que ofrece esta forma de Misterios Iniciáticos  como camino a la Unidad.  Esto lo logra Bruno a través de las  reglas astrológicas  básicas considerando el Primum Mobile, el Secundum  Mobile y la Esfera Local en la forma que se ha esbozado.
  
Bruno parte aquí de la concepción tradicional en cuanto que si el hombre tiene  esencia divina entonces el  divino orden  del universo  se halla dentro del ser humano. Un arte que reproduzca en la memoria del Microcosmos esa organización divina del Macrocosmos se adueñará de los poderes cósmicos ya que se hallan estos  dentro del hombre mismo. Es la aplicación directa de los principios de correspondencia y de mentalismo, ambos plenamente encuadrados  en la Tradición Hermética.  En suma que esta concepción  y práctica  abren  la  puerta de un divino éxtasis que  el Nolano practicó pleno de un verdadero impulso espiritual que se  elevaba sobre todos los falsos dogmatismos.